Una pequeña lesión en la espalda me ha tenido en dique seco durante más de dos semanas, pero por fin hoy he podido salir a trotar un poco bajo los cielos nublados del norte.
Un recorrido para recuperar un poco el tono subiendo hasta la sierra Cabarga. Siguiendo algunos de los pocos senderos que es posible encontrar en Cantabria, ya que casi todos los antiguos caminos están hoy asfaltados.
Para empezar, he cogido un tramo llano que aprovecha la plataforma de uno de los antiguos trenecillos que ayudaron a sacar el hierro de estos montes. Luego ya tocaba ascender por la loma alargada de la sierra hasta la zona de Castilnegro. Y para terminar, una bajada directa después de haber admirado las vistas de la bahía de Santander.
Nada mejor para quitarme las ganas de volver a correr. Lo único malo es que creo que el viejo móvil con el que hacia las fotos se ha muerto, así que he tenido que recurrir al nuevo (que es una patata).
1h 21 min
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