Un libro que narra en primera persona el viaje alrededor de Gran Bretaña al trote, siguiendo la costa. Durante diez meses y atravesando tres países. Sufriendo los rigores del clima y disfrutando a menudo de las dos únicas cosas potables de la gastronomía británica: fish and chips y cakes.
Elise Downing, al igual que Bilbo Bolsón, quería vivir una aventura. Y la suya no es menos temible que la del personaje de Tolkien. De hecho yo preferiría enfrentarme a dragones y orcos antes que tener que correr al borde del mar en Inglaterra durante el invierno.
Teniendo en cuenta que comenzó su viaje a primeros de noviembre, la lluvia, el viento y el barro fueron sus tres compañeros durante meses. Su forma de enfrentarse a estos problemas era habitualmente la de ponerse a llorar. Nada que objetar por mi parte: yo me habría dado la vuelta al segundo día.
Así que lo mejor del libro es seguir los pasos a una chica normal y corriente que, con tozuded maña y lágrimas en los ojos, termina por vivir esa gran aventura con la que soñaba. Y que nos puedes servir de ejemplo para crear nosotros nuestra odisea personal, que puede empezar en la misma puerta de casa. Como en el caso de Bilbo y de Elise.
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