lunes, 4 de febrero de 2013

Libro: Francisco Medina - La pasión de correr


Si algo tiene la práctica de correr de forma habitual es lo 'fácil' que es llevarla a cabo en cuanto a infraestructura e intendencia, te cambias, sales de casa y a correr, estés allá donde estés.

Con esta misma visión  se puede resumir el argumento y también la lectura del libro, La Pasión de correr de Francisco Medina ¿Qué tiene correr? ¿Por qué nos gusta correr? en lugar de ponerse a citar, filosofar, documentar, etc. busca la respuesta haciendo lo que mejor se le da a este escritor, periodista y corredor, entrevistar a un grupo personas de ámbitos, profesiones y circunstancias diferentes entre sí, que sin embargo tienen un mínimo común denominador, todos corren.


Es curioso cómo el hecho de correr hace tabla rasa en todos los personajes y puede resultar igual de emocionante leer la historia de un preso que encuentra su libertad corriendo, cómo Eduardo Zaplana desaparece y sufre como el resto del pelotón cuando se calza las zapatillas, o la apoteósica primera maratón de Anne Igartiburu, contada y sentida como si se disputara en plena olimpiada.

Un libro de verdad, muy fácil y agradable de leer, sin demasiadas pretensiones, que ofrece momentos de una gran sensibilidad y cercanía con las personas entrevistadas.
Por Juan Carlos Barrera Corchuelo.

Cascadas y cuartel


Una salida relativamente fácil al amanecer, con luz durante todo el camino. El tiempo ha sido mejor de lo que pronosticaban, fresquete pero sin viento. Aun así, no sobraban ni los guantes ni el buff.

Sigo corriendo más lento de lo que solía, pero me noto con mejor forma. Las piernas no duelen, el ritmo es más fluido y la respiración va siendo más acompasada (aunque sigo tardando una media hora en ajustar bien el cuerpo).

Con un recorrido así, en esta época del año, no me han hecho falta ni comida ni bebida (aunque las he llevado por si acaso). Es curioso pensar que en verano necesito beber casi un litro en este mismo camino.

20,44 Km (12,70 millas)
431 m
2h 09 min (9,51 Km/h)

viernes, 1 de febrero de 2013

Vuelta norte de San Pedro


Un recorrido largo que llega hasta las dehesas del norte del cerro de San Pedro. He salido desde la ermita de los Remedios, cruzando la dehesa de Navalvillar hacia el este.

En un collado cerca del cerro del Cancho se baja por unas callejas en dirección norte haciendo un recorrido circular alrededor de la dehesa de los Medianillos.

La vuelta desde el collado se hace por el mismo camino (o se puede hacer una variante por la pista que recorre la falda sur de San Pedro).

Lo malo del recorrido es que no hay fuentes ni arroyos de verdad por el camino. Ahora al menos se puede recargar la botella en los arroyuelos estacionales que cruzan el sendero. Pero son hilos de agua muy pequeños que se secarán en cuanto esté un par de semanas sin llover.

El día ha sido perfecto, con calorcillo casi primaveral (15º y sin viento). He ido lento para ver si empiezo a recuperar el ritmo alegre que un día tuve en este tipo de salidas. Al final lo he dado por perdido. Me contentaré este año con: (1) poder correr a secas, (2) aguantar tiradas más o menos largas y (3) no cansarme y disfrutar del recorrido.

En resumen:
  • Sigue la primavera corta de finales de enero (aunque dicen que pronto se va a acabar).
  • Las cigüeñas estaban en parejas en los nidos de Navalvillar crotorando como locas. Además, volví a haber un montón de milanos reales, conejillos, perdices y palomas torcaces.
  • Las zapatillas son realmente comodas. No creo que cambie de modelo mientras mantengan la misma horma.

24,70 Km (15,35 millas)
564 m
2h 46 min (8,93 Km/h)

jueves, 31 de enero de 2013

Datos prácticos para dar la vuelta al Soto de Viñuelas


Para empezar, lo más básico. No se puede correr por el Soto de Viñuelas. Es una finca privada. Grande, pero privada. Lo que sí se puede hacer es darle la vuelta corriendo o en bici. Y es casi imposible perder el camino, ya que siempre llevaremos la valla del Soto al lado.


La vuelta son unos 30 kilómetros de recorrido fácil, con pequeñas subidas y bajadas. Hay que tener en cuenta que no hay ninguna fuente en todo el recorrido, y que el 90 por ciento del tiempo corremos sin sombra alguna (ojo con el calor del verano, que esto es Castilla).

Yo la suelo correr saliendo desde el polideportivo Laura Oter, en Tres Cantos. Es muy cómodo, ya que se puede dejar allí el coche, tienen taquilla y no hace falta carnet para ducharse.

Desde el polideportivo, bajamos por la avenida de los Labradores y seguimos por la calle de la Majada hasta el final. Allí, un camino sale de frente a la derecha y cuesta arriba (justo detrás de una casilla de registros).

Seguimos ese camino de frente hasta llegar a la carretera del Soto de Viñuelas. Ya sólo nos queda cruzar la carretera y pegarnos a la valla durante unos 30 kilómetros. A la derecha en sentido contrario a las agujas del reloj. O a la izquierda, que es como yo la hago.

Los únicos momentos en los que puede haber alguna duda son:

Casa del Salto del Lobo: en la parte norte. Si se va corriendo en sentido de las agujas del reloj el camino parece cortarse en una valla (cerca de un cartel de Propiedad Privada). Lo cierto es que hay una pequeña calleja encajonada a la que se accede por una puerta. Ante la duda, sólo hay que seguir los cables de la línea de alta tensión en dirección Sureste.

Ciudalcampo: una urbanización enorme en el tramo nordeste del recorrido. Aquí hay que callejear un poquito: calles Abedul, Cerro del Toro, del Gamo, del Embajador (en el número 87 nos desviamos a la derecha para recuperar la valla del Soto de Viñuelas).

Arroyo de Viñuelas: hay que alejarse unos 300 metros de la valla por una pista, para cruzar el arroyo por un puentecillo. Luego volvemos a la valla por el camino de enfrente.

Entrada a Tres Cantos: desde la carretera del cementerio hasta la entrada a Tres Cantos hay tan sólo 400 metros, pero lo malo es que hay que hacerlos por el terraplén de la autovía. A pesar de estar separados de la carretera por una valla de hormigón, el sendero está sucio y no es demasiado cómodo. Hay una alternativa más práctica y muy poco más larga: cruzar la autovía por dos puentes peatonales y correr por el carril bici que hay al otro lado (yo no la he probado).

En cualquier caso, existen muchos recorridos marcados en Wikiloc que se pueden consultar por si las dudas.

miércoles, 30 de enero de 2013

Puente de la Marmota


Un recorrido bonito, en el que he incluido alguna pequeña variación para evitar el sifón del canal. En total se reduce un poco el recorrido, pero merece la pena porque el paisaje es más silvestre y el sendero baja hasta la misma orilla del Manzanares.

El caso es que el campo estaba precioso y los campos parecían prados del norte (ya habrá tiempo para que se conviertan en secarrales castellanos). Y yo sigo yendo lento, pero ya no tanto. Además, al menos ahora puedo disfrutar del camino sin cansarme.

En resumen:
  • Con estos días de sol y buen tiempo, los enebros están cargados de polen y explotan en nubes amarillas cuando los rozas.
  • A pesar del calorcillo, los animales siguen escondidos. Hoy tan sólo he visto rabilargos.

12,73 Km (7,91 millas)
356 m
1h 32 min (8,30 Km/h)

martes, 29 de enero de 2013

Libro: Danny Dreyer – Chi Running


Danny Dreyer es un corredor de ultramaratón que se ha pasado los últimos 35 años trotando por ahí. Un día, después de ver durante mucho tiempo a la gente practicando Tai Chi en un parque cerca de su casa, decide pedirle ayuda a un profesor (en plan pequeño saltamontes).

Su idea es fusionar la técnica del Tai Chi con su pasión de toda la vida, pensando en encontrar un sistema que sea a la vez eficiente desde el punto de vista de la energía y que prevenga las lesiones.

El resultado es una técnica que combina a partes iguales sentido común y mucho marketing.


Argumento
Lo mismo que existe la cocina fusión, también se pueden mezclar los principios de varios deportes. La idea es sencilla: correr con la fluidez de movimientos del Tai Chi, a ser posible a una velocidad un poco mayor.

Si a eso le juntamos los conceptos “de forma natural”, “enfocando nuestra mente” y “evitando lesiones” ya tenemos a miles de californianos salivando por seguir una nueva moda.