Por fin he podido volver a las montañas. Porque un trancazo primero, seguido de una lesión, una pandemia y una larga puesta a punto me habían tenido alejado de ellas desde el año pasado. Y nada mejor que volver a reencontrarme con ellas que subiendo hasta la Najarra.
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lunes, 6 de julio de 2020
lunes, 5 de agosto de 2019
Vuelta por el Hueco de San Blas
Hay lugares en los que el cuerpo te pide dejar los caminos marcados y trotar campo a través, para disfrutar de verdad del paisaje. Y hay otros en los que al perder la huella del sendero te internas en un infierno del que siempre terminas saliendo lleno de arañazos.
miércoles, 12 de junio de 2019
La Najarra
Hay que aprovechar estas semanas finales de la primavera para correr por la sierra. Por un lado el tiempo es todavía muy agradable, y se puede trotar sin sudar la gota gorda, al menos a primera hora de la mañana. Además, en la zona más alta de las montañas las genistas siguen en flor. Un espectáculo que transforma los pedregales yermos en un jardín amarillo con olor a miel.
domingo, 14 de mayo de 2017
Hueco de San Blas
El hueco de San Blas es uno de los rincones más bellos de la sierra de Guadarrama. Y el mejor momento para correr por los bosques que cubren la falda de la Najarra y acercarse hasta este valle escondido es un día fresco de primavera. A ser posible después de unas jornadas de lluvias. Al amanecer. Y con algunas nubes rodando por el cielo. Un día como hoy, sin ir más lejos.
domingo, 5 de junio de 2016
La Najarra
Hoy he vuelto a correr por la Najarra, la montaña en la que aprendí a disfrutar del campo. Cuando era pequeño siempre descubría en cada excursión algo nuevo: una planta diferente, un nido de azor, un senderillo abierto por los animales o una cascada perdida en alguno de sus arroyos.
domingo, 26 de julio de 2015
La Najarra
La zona que mejor conozco de toda la sierra es la falda sur de la Najarra y el Hueco de San Blas. Pero hace mucho que no corría por ahí. Así que esta salida me ha servido para ponerme al día de los pequeños cambios que se van produciendo en el monte con el paso del tiempo.
miércoles, 18 de junio de 2014
Cuerda Larga y valle de la Angostura
Un recorrido largo en el que se juntan los kilómetros, el desnivel y las pedreras en las que hay que ir saltando más que corriendo. Por eso había que salir pronto. Así que a las siete ya estaba en el puerto de Cotos dispuesto a tomármelo con calma. Que nunca se sabe cómo van a estar las fuerzas cuando el camino es largo.
lunes, 31 de diciembre de 2012
Najarra y Hueco de San Blas
La última salida del año ha sido por el que quizás sea mi recorrido
favorito. Ida y vuelta por los bosques de La Najarra y del Hueco de San Blas.
Subiendo y bajando por senderos y caminos entre pinos y robles. Además, el día
acompañaba. Sol y fresquito sin viento. Un placer.
Nada más salir, en medio del robledal, dos corzos han venido corriendo
entre los árboles desnudos hacía donde yo estaba. Cuando me han visto han
girado y me han acompañado durante un rato mientras subía. Aunque el alba ya
quedaba lejos, todavía era temprano. El bosque estaba en calma y el suelo
todavía cubierto con la escarcha de la noche.
Con estas temperaturas y carreras cortas, estos días no estoy llevando
ni líquido ni comida. Hoy tan sólo he cogido una botella pequeña y un par de
barritas de chocolate (aunque al final, tan sólo he comido una). Además, por el
camino iba cruzando un arroyo tras otro, por lo que en caso de necesidad
siempre hubiera podido beber agua fresquita.
Han arreglado la pista de la zona quemada, por lo que ha perdido ese
aire de camino abandonado que tenía. Pero creo que por poco tiempo, porque el resto de las pistas que compactaron hace
un par de años ya están empezando a asilvestrarse. Mejor así. Al menos para la
vista.
A la vuelta, cuando bajaba por los bosques del Hueco, el calorcillo ya
se dejaba notar. El olor de los pinos y de la tierra húmeda me ha acompañado
durante el resto del recorrido. Y al final, un trago de agua helada en la
fuente del Cura. Helada de verdad. Hacía daño y todo.
Una excelente forma de despedir el año.
- Un día y un lugar magníficos
- A pesar de que tenía la sensación de que iba muy, muy lento, al final el tiempo ha sido aceptable.
- Sigo corriendo con mayor cadencia y pasos más cortos. Me parece que así controlo mejor las sensaciones del cuerpo y fuerzo menos la máquina.
24,16 Km (15,01 millas)
835 m
2h 34 min (9,41 Km/h)
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