Primera salida matutina del año en Cantabria. Y, a pesar de que suele ser la hora del día en la que corro con más ganas, el resultado ha sido bastante flojo. He salido cansado y no me he quitado la modorra mental en ningún momento. Así que lo mejor era cortar por lo sano y regresar a casa por la vía rápida.
En vista de que tenía el día tranquilo y trotón, por lo menos he ido disfrutando de las vistas. Lo bueno de este recorrido es que permite ver la línea de la costa al norte y las montañas de la cordillera al sur. Con un montón de valles llenos de prados y vacas entre medias.
Además, a primera hora la hierba está todavía húmeda por el rocío de la noche. Así que los colores parecen recién pintados. Un placer para la vista, aunque las piernas vayan cansadas.
1h 42 min
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