Una salida vespertina corriendo tranquilamente durante un rato por el valle del arroyo Peregrinos. Subiendo hasta lo alto del cerro de la Lechuza para admirar el panorama, y disfrutando de un día con sol casi veraniego y una brisa medio invernal.
Con el buen tiempo que lleva haciendo las últimas semanas, los cantuesos han ido floreciendo a su ritmo. Así que no hemos tenido ese momento de explosión morada que podía verse en otros años. El caso es que las plantas han ido alternando sus flores de forma paulatina, y no ha habido ninguna predominando sobre las otras.
Ahora mismo tenemos jaras blancas, altramuces azules, cantuesos morados, amapolas rojas, campos amarillos de jaramagos... y todo tipo de pequeñas florecillas silvestres tratando de llamar la atención de los insectos (desbordados ante tanto trabajo).
Ayer estaban también las peonías a punto de abrirse. Puede que por la parte de Torrelodones ya lleven unos días tentando a las abejas, pero según se sube a la sierra de Hoyo la altitud retrasa la puesta de largo de las plantas. Lo que nos asegura el placer de correr entre campos floridos a los que tratamos por la zona.
1h 52 min
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