Perdido por la Jarosa

Una salida larga, que al final se ha alargado más todavía cuando he decidido volver abriendo camino. Sabiendo lo flojo que voy ahora al trote, la idea era tratar de subir sólo hasta Cabeza Lijar, para disfrutar al menos del paisaje. Pero como me lo he tomado con calma desde la salida, he llegado a la cima con fuerzas para seguir la aventura.

Cabeza Lijar

Hay días en las que nuestro cuerpo no responde a las expectativas, por bajas que sean. Y es algo que notamos desde los primeros pasos al trote. Hoy, por ejemplo, he salido a hacer un recorrido por la Jarosa esperando alargar la distancia si las piernas aguantaban, pero a los diez metros ya sabía que no iban a ir bien en ningún momento.

La Jarosa y Cabeza Líjar

A pesar de que ahora mismo estoy muy poco preparado para correr, después de varias semanas de holganza, tenía realmente ganas de volver a trotar por montañas de verdad. Así que me he liado y he salido por la zona de la Jarosa, con un recorrido facilito, pero que asegura el disfrutar de las vistas desde lo más alto.

Cabeza Líjar

Después de meses sin acercarme a la sierra, hoy por fin he vuelto a disfrutar corriendo por los bosques de la Jarosa. Subiendo hasta la Cabeza nevada de Líjar. Y disfrutando de la soledad del campo al alba.

Cabeza Líjar

Aprovechando un madrugón logístico, he hecho un reocorrido corto y directo subiendo hasta Cabeza Líjar. Como tenía el tiempo justo, no me podía perder demasiado por los pinares de la Jarosa, ni por los montes que separan Madrid, Segovia y Ávila. Pero aunque ha sido un paseo cortito, es una forma perfecta de empezar el día.

Recorrido - Cueva Valiente y Cabeza Líjar

Distancia: 15,5 km.
Desnivel positivo: 840 m.
Tipo de terreno: senderos y un breve tramo por asfalto.
Dificultad: Media. El único tramo un poco duro es la subida directa a Cueva Valiente.
Agua: No mucha. Es lo malo de subir montañas, que los arroyos de aguas cantarinas se quedan para el principio y el final de los recorridos.

La sierra de Malagón es uno de esos espolones que surgen de la columna vertebral de la cordillera Central. Una línea corta de montes que se escapan hacia el oeste. Pequeñas cumbres entre las que destaca tan sólo una. Por su altura y por su curioso nombre: Cueva Valiente.

Cabeza Líjar

Esta mañana la lluvia nos ha dado un pequeño respiro, así que he aprovechado para subir a Cabeza Líjar. Un recorrido sencillo en el que de lo que se trataba era de disfrutar del campo y chapotear un poco en los charcos del camino.

La Jarosa y Cabeza Líjar

Hay estudios científicos que demuestran que nuestro humor mejora cuando paseamos por el campo. Parece que incluso con sólo pensar en un árbol ya mejora la cosa. Pero correr por montañas y bosques nevados, con un sol de invierno iluminándolo todo, es una experiencia que transfigura el alma de cualquiera. Y para saber eso no hace falta ningún estudio.

Cueva Valiente y Cabeza Líjar

Las montañas de la sierra del Guadarrama suelen ser muy poco originales en cuanto al nombre. Abundan las peñas del Águila y hay varias Cabezas Medianas, Peñotas, Telégrafos y Barrancas. Pero en mi último recorrido he pasado por dos picos con denominaciones muy sonoras: Cueva Valiente y Cabeza Líjar.

La Jarosa y Peñas Blancas

No he tardado demasiado en volver a darme una vuelta por el valle de la Jarosa. Como dije en su momento, está cerca de casa, es un bosque precioso y no hay casi nadie (entre semana). Por eso salí decidido a hacer un recorrido cortito, con la intención de darle la vuelta al valle a media altura.

La Jarosa y Cabeza Líjar

A pesar de que está más o menos cerca de casa, y de que sabía que era una zona de la sierra muy bonita, lo cierto es que todavía no había estado nunca en la Jarosa. Pero después de hacer esta vuelta de exploración, no creo que tarde mucho en volver a perderme por sus barrancos y vallejos cubiertos de pinos.