Telégrafo

Tenía ganas de hacer un recorrido largo desde hace unas semanas. Así que, aprovechando que el tiempo era perfecto (entre 10º y 15º, y con algunas nubes) he vuelto a acercarme hasta el Telégrafo.

Las últimas veces que hice este recorrido había salido de noche. Por eso, esta vez me ha parecido un poco raro correr todo el rato con el sol presente. Raro pero agradable, porque lo malo de correr de noche es que no disfrutas nada del paisaje.

Por la hora más tardía (las siete de la mañana), pensaba que me iba a encontrar todo el rato con mucha gente. Pero lo cierto es que casi no he visto a nadie en el camino de ida. A la vuelta sí que me he cruzado con ciclistas, corredores, paseantes, gente a caballo y otros hasta empujando el cochecito del bebé. Es lo que tiene el buen tiempo.

Mi objetivo era hacer un recorrido más largo de lo normal, por eso he ido controlando el ritmo y reservando fuerzas. Además, quería comprobar cómo y cada cuanto tiempo necesitaba comer. Y no escatimar en la bebida (sobre todo después de lo del otro día).

El resultado ha sido excelente. Comiendo de verdad (cada hora y media un sándwich y una barrita) y bebiendo suficiente (un litro cada hora de media) he terminado cansado, pero en mejores condiciones que otras veces con recorridos mucho más cortos.

También he probado algunas barritas nuevas. Y también perfecto. Normalmente suelo llevar unas tipo Mars que me van bien. Esta vez las he alternado con unas de cereal, yogurt y fresas (las hay de marcas miles) y con unas porciones de bizcochos individuales que vende en cajas como Brownies (hay varias marcas). No son brownies de verdad, pero están muy buenos.

Al final he terminado con las piernas cansadas, con los pies machacados y con los pulmones doliendo. Pero todo en su justa medida. No ha habido pájara y hubiera podido seguir todavía un rato más.

En resumen:

• Buen entrenamiento para salidas largas.
• La fauna ha estado presente todo el rato, en mayor o menor medida. Pero yo estaba hoy con la cabeza en otras cosas. Sólo ha habido un momento que parecía sacado de la película Bambi: subiendo al Telégrafo en soledad, se me han cruzado unos conejos, una corza y una ardilla casi a la vez.
• Lo de Segovia se ha puesto complicado. Han retirado casi todos los trenes de cercanías, por lo que tendré que revistar toda la logística.
• Un objetivo alternativo es subir hasta la Bola del Mundo (y volver). Pero tengo que comprobar los senderos para no perecer en el intento.

48,60 Km (30,20 millas)

928 m

5h 44 min (8,48 Km/h)