Pocas zonas de la costa son más bonitas que la que sigue este recorrido. El aislamiento primero y la creación del parque natural han conseguido que el Cabo de Gata haya sobrevivido a la locura del ladrillo.
Desde Agua Amarga, el camino de la costa pasa primero por la cala de Enmedio y la del Plomo, antes de comenzar la parte más difícil. La subida a la rellana de San Pedro es dura de verdad, pero la bajada hasta la cala del mismo nombre es todavía peor.
La cala ya se ha convertido en una especie de camping hippie. Ahora hay mucha más gente que cuando la vi por primera vez hace ya más de veinte años. Al menos la fuente que hay al lado del castillo sigue teniendo la misma agua fresquita de entonces.
El paso por Las Negras es el más multitudinario, con una riada de gente subiendo por la pista que lleva a la cala de San Pedro. Luego, desde la cala del Cuervo hasta el Playazo, vuelve a ser zona desierta y salvaje.
El camino termina en una playa preciosa con baño incluido. A pesar de que no han sido muchos kilómetros, se ha hecho largo por el continuo sube y baja, y por las duras cuestas que crean estas montañas volcánicas.
En resumen:
- Un camino perfecto para hacer en primavera. En verano, el calor se tiene que hacer insoportable.
- A pesar del fresquete del momento, conviene llevar agua siempre. El viento llega a resecar más que el sol.
- Hay que llevar cuidado con las bajadas y las piedras del camino. En algunos momentos un tropezón puede suponer un atajo con caída libre.
15,71 Km (9,76 millas)
597 m
2h 04 min (7,60 Km/h)
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