La estupidez para el que la trabaja

Hace un mes, el equipo de rescate de Chamonix recibía una llamada de socorro. Dos montañeros se habían quedado bloqueados por el mal tiempo en la cara norte de la Aguille du Midi. Lo que en principio era una operación como tantas otras, cobraba notoriedad al conocerse la identidad de los protagonistas: Kilian Jornet y Emelie Forsberg.

Kilian ha explicado que lleva toda su vida en la montaña y que es consciente de los peligros que corre (y nunca mejor dicho). A veces se hace un mal cálculo y esa montaña, que tan bien creemos conocer, nos enseña los dientes.  Sin embargo eso no ha apaciguado los ánimos de los que les han criticado que subieran con poca ropa de abrigo y en zapatillas.

Puede que Kilian y Emelie conozcan sus límites y los peligros que implica la montaña. Pero para los responsables de los servicios de seguridad de montaña lo peor no es tener que rescatar montañeros profesionales de vez en cuando. Lo realmente malo es comprobar que cada vez hay más personas que se meten en problemas sin pensar.

Al ver los videos de Kilian batiendo el record de ascensión al Mont Blanc o al Cervino, hay gente que es totalmente consciente de lo que supone esas hazañas y de los riesgos que suponen. Y hay muchos que se quedan sólo con la imagen de un tipo corriendo en zapatillas y pantalón corto por ahí arriba. Y algunos hasta llegan a pensar que eso lo puede hacer cualquiera.

Kilian es un deportista profesional. Como lo son David Meca, Dani Pedrosa o Javier 'Bubi' Sansó. Son personas que apuran al límite en lo que hacen. Y si alguien piensa que correr en camiseta por la alta montaña, cruzar nadando hasta aquella isla, coger con la moto una curva a 200 o cruzar el Mediterráneo con el barquito lo hace cualquiera, el problema es suyo.

Culpar a un deportista porque se pueda convertir en modelo de desprevenidos y descerebrados no creo que sea justo. Todos tenemos que hacernos responsables de nuestras propias vidas y no hacer el idiota más de lo necesario. Y, si lo hacemos, asumir solitos las consecuencias.