lunes, 19 de octubre de 2015

Canto del Pico y las Colinas

Un recorrido normal y corriente se puede convertir en toda una aventura si lo hacemos en las condiciones adecuadas. Por ejemplo, de noche. O en medio de una ventisca soplando del norte y dejando el paisaje cubierto de nieve. O con lluvias torrenciales, de esas que transforman los caminos en arroyos.

viernes, 16 de octubre de 2015

La Jarosa

La primera helada de la temporada ha llegado en una mañana fresquita y perfecta para dar un paseo por el monte: sol, cielo despejado y nada de viento. Uno de esos días en los que apetece perderse por un bosque. Así que me he acercado al que tenía más a mano.

miércoles, 14 de octubre de 2015

Arroyo de Carboneros

Una de las muchas cosas buenas que tiene lo de correr por el campo es poder cambiar el recorrido según convenga. Así que, viendo que la la parte alta de la sierra estaba escondida entre la niebla, en vez de tirar al monte como las cabras me fui valle abajo.

lunes, 12 de octubre de 2015

Peña Herrera

Después de la lluvia he subido hasta los vallejos que hay alrededor de la Peña Herrera, en la sierra de Hoyo. Un lugar alejado y escondido, con muy pocos senderos y con muchas jaras y peñas que rompen el paisaje. Una especie de refugio para corzos, jabalíes, perdices y demás fauna amenazada ahora con el fin de la veda.

sábado, 10 de octubre de 2015

Canto del Pico

Hace tanto tiempo que no corría de noche que ya casi no me acordaba de cómo se trota a la luz del frontal. Y puede que mi memoria me falle, pero el foco me ha parecido realmente tenue. Un resplandor tacaño que no me aislaba precisamente del campo oscuro a mi alrededor. Será cosa de volver a acostumbrarme.

martes, 6 de octubre de 2015

Entre Torrelodones y las Matas

Aprovechando un rato tonto, he bajado desde Torrelodones hasta las Matas, pasando por la presa del Gasco, siguiendo el canal de Guadarrama y volviendo ya a oscuras hasta el polideportivo. Un recorrido que suelo hacer mientras espero a que salgan mis hijos de sus entrenamientos y cuento con tiempo suficiente.

domingo, 4 de octubre de 2015

Entre Torrelodones y Hoyo

Aunque ya no hace calor, el caso es que esto de correr a las tres de la tarde no es lo mío. Pero siempre es mejor estar al aire libre, echándose un trotecillo por el campo, que quedarse tumbado en el sofá. O al menos esa es la teoría.

lunes, 28 de septiembre de 2015

Sierra de Hoyo

Aprovechando el frescor de la mañana he subido hasta la sierra de Hoyo. Para disfrutar de las vistas. Y también para ver que tal aguantaba un recorrido empinado. Y como me lo he tomado con calma, he terminado sin cansarme. Con un ritmo más rápido de lo que yo suelo hacer (unas 120 zancadas por minuto), pero con pasos más cortos.

viernes, 25 de septiembre de 2015

Canal de Guadarrama

Aunque oficialmente ya estamos en otoño desde hace unos días, lo cierto es que el tiempo no se ha enterado. Suele pasar. Porque lo normal a estas alturas del año es que todavía tengamos días con el sol pegando fuerte y noches relativamente templadas. Y unas tardes de calor perfectas para sudar la gota gorda.

martes, 22 de septiembre de 2015

Correr de nuevo

Después de unas semanas de descanso mental, he vuelto a correr. Con las piernas de palo por la falta de ejercicio y con un objetivo en la cabeza: seguir disfrutando del campo al trote. Por eso tengo que cambiar unas cuantas manías que, como los árboles, no me dejaban ver el bosque.

viernes, 4 de septiembre de 2015

La parada

Hay gente que piensa que esto de correr es sufrir. Otros realmente sufren para conseguir sus objetivos (se llama entrenamiento). Pero para mí correr ha sido siempre algo agradable, que disfruto desde el primer paso hasta el último. Aunque llegara a veces derrotado por el cansancio, nunca me preguntaba qué demonios estaba haciendo. Por eso hoy me he parado en mitad de una carrera.

jueves, 3 de septiembre de 2015

Arroyo de Peregrinos

Despedida de agosto con uno de mis recorridos tradicionales. Siguiendo el curso del arroyo Peregrinos, pasando por las cascadas y volviendo a casa por el alto del Robledillo. Un camino que no es ni demasiado largo, ni tiene demasiado desnivel. Lo mejor para trotar cuando vas flojeando.

martes, 1 de septiembre de 2015

Arroyo de Trofa

Lo malo de la física es que todo lo que baja, luego sube. Así que este recorrido, que desciende primero siguiendo el curso del arroyo de Carboneros, tiene como pequeña cruz la subida posterior hacia Hoyo. Un inconveniente tan ligero que se hace divertido cuando se está en buena forma. Pero cuando el paso es cansino, penamos hasta en los badenes.